Oleadas de ataques masivos a cientos de ordenadores bajo la apariencia de Correos

En las últimas semanas empresas y particulares han visto un email de apariencia inofensiva en sus bandejas de entradas. Bajo el asunto de «Carta certificada no entregada» y con la estética que utiliza Correos para este tipo de notificaciones, se informa al particular de que tiene un envío que no ha podido ser entregado. Para saber más información del mismo, o imprimir el justificante (hay varias versiones), debe clicar en un enlace que lleva a un formulario. Es precisamente este impreso el que, bajo la apariencia de un PDF, esconde un temible ejecutable en el botón de imprimir.

El usuario todavía no sabe que acabar de activar un troyano en su equipo ya que este es, ante todo, un virus «silencioso». El mencionado botón de imprimir parece no funcionar, pero en cambio el virus ha comenzado la labor de encriptar todas las carpetas del ordenador. En ese mismo instante y, como si de una película se tratase, se recibe un mensaje avisándonos de que tenemos todos nuestros archivos cifrados y se nos ofrece la posibilidad de recuperarlos si pagamos un rescate de 299€. Eso sí, en bitcoins. No se preocupe que si no sabe cómo hacerlo los piratas le enseñan cómo. Comienza además una cuenta atrás de 72 horas en las que se nos avisa de que o atendemos a las peticiones o el rescate ascenderá a 598€.

Borrar el virus a estas alturas no serviría tampoco de nada y la mejor opción pasa por restaurar la última copia de seguridad que tengamos. Esta es la opción más eficaz y desde luego la más económica.

Ante este tipo de ataques las recomendaciones son las siguientes:

1. Ser conocedor que empresas como Correos, bancos, instituciones nacionales, etc… jamás piden que ejecutemos ni rellenemos formularios en sus notificaciones. Así mismo, correos electrónicos que no se han solicitado o de usuarios desconocidos deben ser tratados de manera especialmente cuidadosa y, ante la duda, lo mejor es eliminarlos directamente.

2. Por suerte para el usuario, la mayor parte de estos emails presentan una redacción en español bastante pobre y que llama la atención, por lo que se debe prestar atención a este tipo de detalles.